Esta receta es sencillísima, muy sabrosa y rápida de preparar. Cogemos medio kilo de bacalao desmigado (desalarlo en agua durante doce horas o comprado ya desalado y congelado, pues hay marcas en el mercado que están muy acertadas).
Empezamos con un sofrito de cebolla, un diente de ajo y una hoja de laurel. Cuando esté a medio pochar añadimos el bacalao y freímos hasta que pierda el agua y coja un poco de color.
En otra sartén confitaremos unas tiras de pimiento del piquillo.
Añadimos al bacalao cuatro cucharadas de tomate, frito por nosotros o de bote. Le ponemos el pimiento y dejamos freír removiendo para que no se pegue hata que quede un poquito caldoso, pero con textura trabada. Servir caliente.
Empezamos con un sofrito de cebolla, un diente de ajo y una hoja de laurel. Cuando esté a medio pochar añadimos el bacalao y freímos hasta que pierda el agua y coja un poco de color.
En otra sartén confitaremos unas tiras de pimiento del piquillo.
Añadimos al bacalao cuatro cucharadas de tomate, frito por nosotros o de bote. Le ponemos el pimiento y dejamos freír removiendo para que no se pegue hata que quede un poquito caldoso, pero con textura trabada. Servir caliente.
Ingredientes:
Migas de bacalao.
Cebolla. ajo, tomate, pimiento piquillo, laurel.